MAYHEM FESTIVAL 2013 en San Manuel Amphitheatre (San Bernardino, California, USA)
Sábado 29 de Junio de 2013
por Lucas Gordon
El sábado 29 de Junio, en el San Manuel Amphitheater, comenzó la última edición del famoso Rockstar Energy Drink Mayhem Festival.
Con 26 fechas en total y finalizando el 4 de Agosto en Dallas, el evento contó como número principal con el talentoso Rob Zombie.
El comienzo
La fiesta dio inicio a la 1 PM, mientras que mucha gente estuvo desde la mañana acampando en el amplio estacionamiento del lugar, donde se ponían a hacer barbacoas y fiestas.
Los encargados de ponerle pasión a la agobiante tarde estuvieron divididos en tres escenarios aledaños al principal (al anfiteatro).
Thrown Into Exile fue la primera de las bandas que, en búsqueda de consagración pero con un interesante número de fans, le fue dando electricidad a un desierto ya abultado de personas con tachas, prendas negras y cabellos largos.
Mientras se desfilaban artistas como Battlecross, Butcher Babies (que me las perdí, pero me crucé a sus hermosas cantantes en la tienda de prensa) y Job For a Cowboy, se sucedían en el escenario de Jagermeister, y se intercalaban con las que tocaban en el Musician Institute Stage y en el Sumerian Stage.
El grupo Attika 7 que ya cuenta con integrantes con un poco más de experiencia, como es el caso del actor porno y la ex cara de Biohazard, Evan Seinfield, les tocó un espacio en un horario bastante temprano por tratarse de un combo conformado por un par de conocidos nombres.
Al igual que Attika 7, en el Musician Institute Stage cerraron los Children of Bodom con una estridente performance, la cual incitaba aún más a los espectadores, pero un rato antes, como a las 5 PM en el Jager Stage los Machine Head también daban fin a la sección adicional del festival.
En definitiva los Children, con Alexi Laiho al frente, fueron la última agrupación que tocaba en esa área, dando el último bombazo.
Camino al escenario principal
De allí, solo tenía cinco minutos para salir corriendo… (Ja! Con ese calor, el único que habrá corrido, habrá terminado en emergencias) al escenario principal donde se iba a desatar la más candente furia de heavy metal del día.
Los primeros en intentar ponerle el toque de fría muerte a una tarde que no daba tregua con el calor fueron los Amon Amarth, quienes con su Death Metal Melódico, subieron al escenario con una decoración que incluía una imitación de la popa de un barco vikingo, haciendo demostración de la cultura nórdica.
Con solo seis mazos al estilo Thor, se despacharon con lo mejor y más nuevo de su corto set, destacando “Destroyer of the Universe”, más uno de sus primeros cortes “Death in Fire” y “Twilight of the Thunder God”, con el cual cerraron.
Del death metal pasamos al metal progresivo con especialización en Sludge Metal (una combinación entre Doom y Hardcore) con Mastodon, quienes son oriundos de la costa este.
Troy Sanders (leer la anécdota más abajo) y sus séquitos tuvieron que meter en 45 minutos de show, diez canciones. Abriendo con “Black Tongue” e incluyendo canciones con excelentes percusiones en su haber de doce años de carrera, zigzaguearon al pasado con “Crystal Skull” y regresaron casi al presente con su último hit “Dry Bone Valley”, mientras que el cierre no podía ser otro que la pieza musical que los llevó a la fama, “Blood and Thunder”. Creo que deberían haber agregado “Divinations”, pero se mandaron “Oblivion” dentro de su repertorio, lo cual compenza.
Preludio a lo mejor
Mientras el sol ya estaba debilitándose, Five Finger Death Punch tomaba posesión del concierto.
El quinteto que incluye a mi ex vecino de edificio Jason Hook, ya había estado en este festival en el 2010, pero su sed por patear más traseros los trajo de regreso en este 2013.
El repertorio de diez temas los llevó a comenzar con su último corte “Lift Me Up” de su placa “The Wrong Side of Heaven and the Righteous Side of Hell, Volume 1”, que salió el 30 de Julio en USA.
Se saltearon algunas canciones que han llegado a los altos puestos de los rankings como “Remember Everything” y “Far From Home”. Todo no cabe en una hora de concierto.
En cierto momento, su vocalista Ivan Moody hizo subir a varios chicos, no pude prestar mucha atención porque me encontraba en una zona alejada. Según entendí, se puso a hablar de los veteranos de guerra. Seguido a esto, comenzaron a tocar el cover “Bad Company” de la mítica Bad Co. que formó parte de su CD “War Is The Answer”.
Luego del solo de batería un poco rítmico pero desaforado, a cargo de Jeremy Spencer (sesionista de WASP) se continuó con los machazos como “Coming Down” (2012), “Never Enough” (2008) y cerrando con su primer éxito “The Bleeding” (2007).
Zombie y su Máquina de Veneno Regenerativo de Ratas
Hasta acá todo bien, pero acompañado por la oscuridad de la noche, a las 9:50 PM, el maestro del horror show (no, Alice Cooper no. El otro!) Rob Zombie, comenzaba a hacer alarde de su grotesco y por demás llamativo espectáculo, que aparte sirvió de promoción de su nuevo compacto “Venomous Rat Regeneration Vendor” (#7 en ranking 200 de la Billboard).
Justamente abrió con “Teenage Nosferatu Pussy” perteneciente a la nueva edición, y ahí es donde realmente comenzó la emoción de la noche de todos, pero en especial de quien les escribe.
John 5 y Piggy D salieron completamente disfrazados, y con el calor que hacía (no, no soy un flojito, hacía un verdadero y puto calor incluso de noche), yo hubiera jurado que si no se sacan las máscaras y un poco de ropa, no durarían en pie la hora y diez minutos de su tiempo estipulado.
Al siguiente track “Superbeast” se sacaron las máscaras; y para cuando termina “Meet The Creeper” se apaga todo. Junto a ellos aparecen dos soldados con máscaras de oxígeno y como con un tanque lanzallamas, pero en vez de lanzar fuego, tenían dos luces direccionales que apuntaban durante todo “Living Dead Girl” a la gente. Pero antes de comenzar la canción, Zombie le pide a sus fans que alcen a las chicas sobre los hombros del público.
Con una tibia respuesta, arremete de vuelta diciendo que MUESTREN a las fans de Robert, y suben varias decenas de mujeres sobre los hombros de sus respectivos amigos, parejas o quien se haya aguantado tener a una chica sobre los hombros. Pero lo más delicioso es que varias, tras la efusión del momento, se quitaron lo que tuviesen puesto del torso para arriba y muchos pudimos ver sus atributos.
Claro! En Youporn o en un Strip Club se podrá ver de todo, pero es el hecho de verlas en un momento inesperado, allí comenzó entonces “Living…”.
Como no podía ser de otra manera “More Human Than Human” de White Zombie, no se dejó de lado y este momento dio lugar a que aparezca el primero de varios muñecos gigantes.
Luego la banda de Rob se mandó un instrumental con un John 5 tocando guitarra acústica. Me pareció raro porque la música de Zombie siempre fue de tendencia metal industrial.
RZ luego vuelve a aparecer al tope de una estructura que se deslizaba con ruedas, y digo vuelve porque en el inicio de este recital, Rob estaba sobre una de estas varias estructuras metálicas.
Allí se despachó con otro corte de la más reciente obra musical “Venomous…” que es a mi consideración el más ganchero: “Ging Gang Gong De Do Gong De Laga Raga”; porque el balbuceo de estribillo es contagioso.
Luego de un solo de batería de Ginger Fish que empezó super bien, con muy buen ritmo, pero terminó en un típico y predecible alocado solo de batería para el común palurdo de metal quemado. “Never Gonna Stop (The Red, Red Kroovy)” llevaría al primer problema de sonido y el único de la noche.
Faltando como minuto y medio de finalizar esta melodía, se cortaron los parlantes exteriores y solo quedó el sonido de escenario (el de los monitores).
La verdad que con ese sonido solo y de donde yo estaba ubicado, que era a veinte metros del mismo Zombie, se escuchaba pasable.
Dada la situación, y por lo fuerte que estaban los bafles, se ve que ninguno de los músicos se percató que se había cortado el sonido que salía a nosotros y la gente terminó coreando el tema hasta el final. Es evidente que el fan de Rob es fiel y quedó aquí demostrado.
Luego del turno de “Sick Bubblegum”, el vocalista de White Zombie hace alarde de una nueva estructura gigante representando un viejo pasacassette y junto a esto, vino el nuevo corte promocional de la película “Lords of Salem” del mismo nombre, donde la pantalla gigante de fondo más todas las pantallas que formaban parte del escenario mostraban imágenes del filme, y se podía ver a su esposa Sheri Moon Zombie, quien fue la actriz principal.
Entre el footage de la peli y Zombie a diez metros sobre el pasacassette, me quedaba un poco de atención para ver la guitarra de John 5 con iluminación en la parte del cuerpo.
A “Dead City Radio and the New Gods of Supertown” le siguió el último clásico de White Zombie, “Thunder Kiss ’65”, donde ingresa al stage otro de los muñecotes monstruosos. A modo de darle un nuevo cambio a la interpretación del mismo, a la mitad, John 5 se despachó un solo de guitarra.
La parranda ya llegaba a su fin con una muy buena versión de Grand Funk Railroad, “We’re An American Band”, la cual la considero un cliché y me parece una falta de consideración a cientos de temas que podrían expresar un mensaje similar y que además podrían llegar a ser igualmente conocidos.
En fin, antes de comenzar con este himno norteamericano, Robertito nos sorprende a todos reingresando al escenario desde el costado, a pocos metros de donde me encontraba. Vestido como si fuese un Tío Sam sonámbulo, allí saludó a los primeros fans que corrieron hacia él y se dirigió a la plataforma.
Como siempre hay un encore (corte) y en lo que los fanáticos comenzaban a ovacionar, reaparece el combo para cerrar con “Dragula“, sobre una última estructura de metal con forma entre mamut y alienígena como el de la película “Depredador”.
La velada fue un verdadero éxito, y salvo por el agobiante calor, de noche la temperatura permitió que se disfrutase más del evento.
Como fanático de White Zombie, hubiera querido más material interpretado aquí, e incluso me esperé con ansias “Foxy Foxy” de su carrera solista, sin resultados positivos.
De todos modos, Rob Zombie no solo dejó demostrado que es un muy buen compositor, sino más aún un fantástico showman!
After party
Para cuando comenzaron a bombardear a la gente con papelitos de color rojo y blanco (se ve que no habría dinero para que esté también el papel azul, que son los colores de la bandera) en “Dragula“, me fui al backstage.
Allí estaban casi todos los artistas del festival. A diferencia de otros conciertos, no divisé a ningún famosillo, salvo a la dulce Emily Lazar de September Mourning, con quien hablamos unos minutos, pero andaba de aquí para allá como si tuviera un cohete en el trasero. Ja!
Anécdota
Troy, bajista y vocalista de Mastodon, estaba a unos metros mio y cuando lo veo, voy a pedirle una foto.
El pícaro barbeta me ve y con su mano me toca las bolas (bueno, sobre mi bermuda) y me quedé sorprendido. Después me dijo que lo sentía, que fue maleducado de su parte.Yo le dije que no hay drama.
Pero quedó una experiencia tal vez un poco incómoda, aunque anécdota al fin.
Espero que en algún concierto de Vixen me suceda algo similar con las chicas, de preferencia Roxy Petrucci.
Cobertura: Lucas H Gordon, Alan Sosa, Horacio Gambarte.
Fotos: Gentileza de Alex Kluft
*En memoria de Leigh Ann Zienali